13 julio 2015

FRAGMENTOS DE VIDA

Micro


Borró el mensaje nada más leerlo. Alguien podría equivocarse si leía aquel trozo de cielo que, ahora, se vería inexcusablemente abocado al olvido. Recompuso como pudo los despojos que amagaban con aflorar a sus gastadas pupilas. 

Cada vez era más complicado sobrevivir a ese infierno apacible en el que se había convertido su reposada convivencia conyugal. 

Se retocó los labios frente al espejo y salió sonriendo a su marido.



3 comentarios:

Fe r dijo...

En tres trazos de buen rouge, pintas una realidad irrefutable de muchos. Me ha gustado mucho,

Un abrazo!

Fer

Unknown dijo...

Muy real.

Anónimo dijo...

Las palabras concretas en el momento concreto.. enmarcadas en el escenario correcto. Buen micro Juan.

El tigre herido...