09 octubre 2015

Mis reflexiones: GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ 1


El genial escritor y Maestro de las letras colombiano nos dejó miles de páginas absolutamente imprescindibles. 
Me impactó esta frase que traigo a colación ya que me recordaba a la Ítaca del no menos inmortal Kavafis. Nos esforzamos tanto en obtener lo que, supuestamente, es un destino o final del trayecto dorado y, sin darnos cuenta, descuidamos la senda y el camino por el que dejamos nuestras pisadas.
¿Quién está viviendo, anticipadamente, por nosotros? ¿Hasta qué punto ese destino anhelado que deseamos no viene impuesto por modas, arquetipos y hábitos, esquemas culturales o cualquier otra circunstancia ajena a nuestra verdadera naturaleza? 
Viviendo en sociedad, es absolutamente obvio que recibamos muchas influencias, de las más diversas y variadas fuentes. Sería insensato no prestarles la atención que merecen. Ahora bien, dicho esto, más insensato aún podría ser abandonar nuestro espíritu y permitir que la agenda vital que debiera trazar nuestro camino fuese marcada exclusivamente por la voluntad de otros. Por tanto, sin dejar de realizar una razonable y sensata previsión de futuro, empecemos a valorar el tránsito, el camino y la escarpada. Quizás de esta manera podamos alcanzar, caminando, un estado de ánimo razonablemente compatible con la felicidad.
Aquí, el Maestro nos ofrece no sólo una lección literaria, que también, sino un aforismo existencial; una lección para la vida.


2 comentarios:

Siloe_ Sombra dijo...

Lo malo es que muchos pasan sobre las letras como si la vida o los ejemplos no fueran con ellos... logicamente un escritor como García Marquez inspira, sacude y despierta, pero solo a aquellos que mantiene la mente abierta.
Un placer leerte.
Reme.

Mila Gomez dijo...

Creo que efectivamente muchas de las cosas que vivimos no las hemos elegido libremente, ya lo hicieron otros por nosotros con anterioridad y por algunos motivos.

Buena reflexión amigo.
Un abrazo.

El tigre herido...